Quiero empezar por esta descripción: se trata de un ser indefenso, al que hay que cuidar, no se le puede dejar sólo durante mucho tiempo porque ni siquiera se vale por si mismo para realizar sus AVD’s (actividades en la vida diaria), de hecho, si preguntamos a su cuidadora principal, en la escala Barthel tendría un cero; incontinencia total, para algunos imposible mantener una conversación coherente, sólo te mira, sonríe, se puede pasar el día llorando, como puede ser que sonría constantemente, probablemente te encante contemplarlo,… Hay que darle de comer, beber, escoger los alimentos adecuados, bañarlo, también hay que acariciarlo, mimarlo, es mejor no hacer mucho ruido en su presencia, pasa la mayor parte del día en una cama, no controla mucho el movimiento de su cabeza, hay que estar pendiente de ponerle una mantita para que esté abrigado, hay que cuidarlo con mucha delicadeza, tener paciencia, y lo cuidamos en casa ¡qué trabajo! ¿verdad? Ahora bien, es un ser que te hace salir de ...