En el umbral del nuevo año, alzamos nuestras plegarias,
bajo el manto de la Virgen María,
buscamos esperanzas diarias.
Que la paz del Altísimo guíe nuestro
andar,
y que en cada paso, podamos Su amor
demostrar.
Con corazones rebosantes de buenos
deseos,
proyectamos un futuro lleno de senderos
luminosos.
Que en este año que nace, con fe
renovada,
superemos pruebas, y en el amor, alma
consagrada.
La Virgen María, ejemplo de fortaleza y
gracia,
nos inspire a ser asertivos en toda
amenaza.
Que en la adversidad, seamos
resilientes,
con esperanza en el corazón, siempre
pacientes.
En este viaje llamado vida, compañeros
de camino,
construyamos puentes, no dejemos a nadie
desatendido.
Seamos amigos leales, hombro en la
tormenta,
extendamos la mano, ser luz que
alimenta.
Que en cada día que amanece, demos lo
mejor,
que nuestra luz interior brille con
fulgor.
En la sinceridad, la empatía y la bondad,
encontremos la senda de la felicidad.
Que el año nuevo sea un lienzo en
blanco,
donde escribimos historias de amor y
encanto.
Con la Buena Madre como guía celestial,
caminemos juntos hacia un futuro
espiritual.
Así, con fe en el corazón y sueños en vuelo,
brindemos por el año nuevo con anhelos.
Que la gracia divina nos acompañe cada
día,
y en este ciclo, en unidad y comunidad,
encontremos la alegría.
@pasbiopal
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